Dormir bien para aprender mejor

¿Sabías que un buen descanso es tan importante en la niñez como llevar una dieta sana o practicar ejercicio? Vivimos en una época donde la rutina, los trabajos demandantes y los dispositivos electrónicos sobre estimulan los sentidos tanto de adultos como de niños. 

Los padres tienen que conformarse con dormir entre 5 y 6 horas diariamente, y creemos erróneamente que si nuestros hijos se pierden una o dos horas del sueño al día no traerá consecuencias a futuro. La realidad es que todos los niños se desarrollan mejor en sus actividades si tienen una rutina nocturna habitual. 

¿Sabías que muchos de los niños que no prestan atención a sus clases, mejorarían su rendimiento académico con sólo dormir el tiempo suficiente?  Cuando los pequeños son privados del sueño con regularidad, se originan problemas de comportamiento y de salud.

Beneficios que una larga noche de sueño le darán a ti y a tus hijos:

  • Favorece la actividad cerebral y desarrolla la imaginación.
  • Mejora el sistema inmunitario.
  • Consolidar la memoria y reorganiza la información.
  • Permite que el cuerpo produzca las hormonas que nos hacen felices.
  • Incrementa el rendimiento académico.

Aunque sabemos que las necesidades del sueño varían dependiendo de la persona, la Academia Estadounidense de la Medicina del Sueño, creo pautas para ayudarte a determinar si tus hijos duermen lo suficiente para desarrollarse de manera óptima, jugar y aprender.

Toma en cuenta que si tus hijos todavía toma siestas, debes sumar ese tiempo a las  horas que comúnmente duerme:

EDAD

Tiempo de sueño recomendado en 24 horas.

Bebés: 4 a 12 meses

12 a 16 horas (incluyendo siestas)

Niños pequeños: 1 a 2 años

11 a 14 horas (incluyendo siestas)

Edad preescolar: 3 a 5 años

10 a 13 horas (incluyendo siestas)

Edad escolar: 6 a 12 años

9 a 12 horas

Adolescentes: 13 a 18 años

8 a 10 horas

La Psicóloga Alejandriana Cuberos recomienda establecer buenos hábitos para dormir bien desde que nuestros hijos son pequeños. 

  • Dormir bien debe ser una prioridad para tu familia, da un buen ejemplo a tus hijos, muestrales que dormir bien es parte de vivir un estilo de vida sano, como comer bien y hacer ejercicio con regularidad.

  • Establece rutinas. Si establecen la misma hora para despertarse, para las comidas, para la siesta y para jugar le ayudará a su niño a sentirse seguro y confortable y le ayudará a que la hora de dormir sea fácil.

  • Supervisa el tiempo que pasan frente a una pantalla. Los expertos recomiendan no tener televisores, computadoras, teléfonos y tabletas en la habitación de los niños, especialmente en la noche. Para prevenir interrupciones del sueño, apague todas las pantallas por lo menos 60 minutos/1 hora antes de dormir. 

  • Establece un entorno seguro para dormir. Baja la intensidad de las luces antes de ir a dormir, controla la temperatura tu hogar, cenen de forma ligera y temprano.

Sabemos que cada familia es diferente, adapta tus horarios y dale prioridad a los buenos hábitos, verás cambios significativos en tu vida como en la de tus pequeños.